De nuevo… “Un sueño”
Leí no recuerdo donde que para poder realizar un sueño hacen falta dos requisitos, el primero es tener una gran capacidad para soñar, y el segundo es la persistencia y la fe en ese sueño.
Hace ya tiempo que tengo un sueño, uno de esos que crees demasiado grandes para que se hagan realidad, esos que te arrancan una sonrisa cuando pasan por tu cabeza, pero piensas que es irrealizable, sueños que incluso llegas a creer que morirán contigo.
Un día este sueño decidió ocupar una parte muy importante de mi tiempo y llegué a la conclusión de que si no le prestaba atención permanecería en mi interior como algo pendiente, convirtiéndose en un poderoso enemigo.
Eché un vistazo a mi vida desde fuera y pensé que no había nada que me impidiera realizar mis sueños, y en particular este, pensé que escuchar lo que me dicta mi interior era muy importante, y que caemos en un error si creemos que uno no puede hacer coincidir lo que quiere ser con lo que es.
Este sueño consiste en recorrer el continente Americano desde el hemisferio sur al hemisferio norte, muchos ya lo hicieron antes y otros me seguirán seguro; yo sólo pretendo unir con mi moto Ushuaia y Alaska por la ruta Panamericana, los dos extremos de la inmensa América, la ruta por tierra más larga del mundo, la ruta de las tres Américas, y así voy a hacerlo.
No llevo ninguna bandera de paz, no soy la voz de ninguna organización política o económica, ni por los derechos humanos, lo hago por mis ganas de conocer los confines de un continente donde milenarias culturas indígenas se mezclan con la tradición europea. Donde blancos, negros, mulatos, mestizos e indios conviven bajo un mismo cielo, donde la geografía muta del desierto a la selva tropical o las elevadas montañas. Donde en algunos lugares el calor derrite el asfalto que en otros cubre la nieve y el hielo.
Sé que cada kilómetro que recorra me sentiré más feliz, tanto que estoy seguro que por las noches, cuando después de un día agitado me disponga a dormir, daré vueltas dentro de mi saco mirando las estrellas sin lograr conciliar el sueño.
Sobre la moto me siento dueño de los caminos, poderoso, feliz, muy feliz, es como si no hubiese meta u objetivo que no pudiera alcanzar. Viajar en moto no es una mera anécdota, es una experiencia vital, transformadora y enriquecedora
Junto a mí llevaré a mis seres queridos, mi familia, a mis amigos que dejé en casa pero que siempre me acompañan, y por supuesto, como no podía ser de otra manera, a mi padre que viaja siempre conmigo, mi padre, al que sigo buscando en la oscuridad de mis noches de insomnio cuando todavía confío en que cerrar los ojos y creer con fuerza me permitirá despertarme en un tiempo que ya se fue ; a todos y a cada uno de ellos les agradezco que crean en mí.
Para conseguir mi reto y llegar hasta el final de la ruta con éxito tendré que estar muy atento para afrontar y solucionar día a día las distintas situaciones que irán surgiendo, todo forma parte del desafío.. mi desafío.
Una de mis primeras lecciones, seguro, será afrontar de nuevo la soledad de la ruta,, controlar y afrontar en todo momento mis temores, la carretera es de algún modo una escuela de la vida en donde uno acaba por aprender lo inimaginable, os puedo dar fe de ello.
Veré tanto y conoceré a tanta gente.
Siempre imagino durante la preparación y vivo más tarde mis viajes, como algo especial en lo que se refiere a los sentidos, siempre por carácter y manera de ser viajo con la mente muy abierta y con todos mis sentidos a punto para dejarme sorprender en todo momento, de alguna manera concibo este viaje ahora más que nunca como un viaje a mi interior, el gran viaje que todos tenemos que aventurarnos a realizar en algún momento de nuestras vidas
Os agradezco vuestro apoyo día a día para ayudarme a seguir juntando fuerzas y os deseo a todos y a cada uno de vosotros la mayor suerte con cada uno de vuestros sueños.
Lluís Lafuente
El Reto
El reto que me he planteo es recorrer la ruta por tierra mas larga del mundo, LA PANAMERICANA, recorrer sus aproximados 30.000 km y lo haré con mi moto y totalmente en solitario , sin ningún vehículo de soporte.
Teniendo en cuenta las fechas del inicio del viaje, Febrero de 2012, este lo haré de sur a norte de manera que siempre tendré el clima a mi favor.
Saldré de Ushuaia en tierra de fuego (Argentina) e iré hasta Prudhoe Bay en Alaska (USA) cruzando todo el continente americano del hemisferio sur al hemisferio norte.
La moto saldrá en barco un mes antes del puerto de Barcelona hacia el de Buenos Aires y yo la seguiré en avión semanas más tarde, una vez en Buenos Aires y después del deseado reencuentro partiremos hacia Ushuaia desde donde comenzará mi reto cruzando 14 países hasta llegar a Alaska y una vez finalizado aproximadamente 5 meses más tarde, desharé el camino desde Alaska atravesando Canadá para entrar de nuevo en USA por Montana y siguiendo hacia el este hasta llegar a la ciudad de Nueva York desde donde volaremos la moto y yo juntos en el mismo avión hasta la ciudad alemana de Hamburgo y de allí a la ruta de nuevo hasta llegar a Barcelona, a casa ..
Sumando los kilómetros que hay desde Buenos Aires hasta Ushuaia , los que hay desde Prudhoe Bay hasta Nueva York y los que hay desde Hamburgo hasta Barcelona, el total de kilómetros recorridos por carretera con y sin asfaltar será aproximadamente de 40.000
Pero .. realmente que es esto de la panamericana ?
Pues bien , la carretera panamericana conocida popularmente por “La Panamericana” es una prodigiosa obra de ingeniería, un sistema colectivo de carreteras de aproximadamente 30.000 kilómetros de largo que casi vincula a todos los países occidentales del continente americano y conecta en un solo tramo de carretera “tierra de fuego” en el hemisferio sur en Argentina con Prudhoe Bay en el hemisferio norte en Alaska.
Esta inmensa carretera que cruza 14 países a lo largo de aproximadamente 30.000 kilómetros se ve interrumpida solo en un pequeño tramo de 80 kilómetros entre las fronteras de Colombia y Panamá en el que la selva más densa , el narcotráfico y la guerrilla no permiten continuar por tierra.
A este fragmento de tierra se le conoce como “el tapón de Darién” y es casi totalmente inexpugnable por tierra, cada año al menos un par de “locos” son secuestrados, rescatados o recuperados en bolsas de plástico al intentar atravesarlo por tierra.
Muchas personas particularmente en Panamá se oponen a que se complete la porción del tapón de Darién a la carretera Panamericana por diversas razones , el deseo de proteger la selva tropical ya que esa zona concretamente es una reserva de la biosfera y también por proteger la vida de los pueblos indígenas de la zona.
La carretera Panamericana pasa por paisajes, climas y sistemas ecológicos muy diversos, de los desiertos y las selvas tropicales densas hasta las montañas llenas de nieve y hielo.
Debido a que la carretera pasa por muchos países esta es poco uniforme, por muchos de sus tramos no se puede circular en época de lluvias, en algunos países los tramos asfaltados no superan el 35% del total y por muchas regiones es muy peligroso circular en moto
La James Dalton Highway (Alaska)
La James Dalton transcurre a lo largo de 414 millas atravesando la tundra ártica, una carretera en su mayor parte de grava suelta que se convierte bajo las ruedas de los camiones que la transitan en un verdadero campo de tiro cuando las piedras salen disparadas en todas direcciones. La Dalton Highway fue construida para poder llegar a los campos petrolíferos de las bahías del norte, en todo su recorrido hasta las playas de Prudhoe Bay apenas existe ningún lugar habitado y una avería del vehículo en pleno invierno puede llegar a ser mortal, como curiosidad, decir que las empresas de alquiler de vehículos prohíben a sus clientes conducir por esta ruta.
Una de las rutas mas representativas es la que transcurre por el desierto de Atacama en chile desde Arica a Iquique.
En este caso el peligro no está en las curvas ni en las estrecheces. El peligro en esta carretera esta en la monotonía de sus larguísimas rectas que provocan que la gente se duerma o preste poca atención con consecuencias más que terribles y en el fuerte viento que te hace imposible circular con la moto recta y hace desaparecer “literalmente” la carretera delante de ti. En esta carretera en concreto, uno puede encontrar en las cunetas decenas y decenas de “animitas” que son los pequeños mausoleos que los familiares montan en el lugar del accidente para honrar y recordar a los suyos.
